Capítulo 63

—Es hora de irnos —su voz resonó cerca de su oído y luego sintió la palma en su vientre.

Ella puso su mano encima de la suya y luego se giró en forma lenta, Xavier iba a caminar para salir de la terraza, pero ella lo frenó.

—¿Confías en mí? —le preguntó Ana.

—Por supuesto…

—Entonces mírame a los ojo...