Capítulo 10 ¡NO ME VOY A DAR POR VENCIDA!

Seis meses después.

Rubén llegó corriendo al hospital, buscando entre los pasillos a Myriam, hasta que la encontró abrazada a Tony.

—¿Qué pasó? —cuestionó—, vine apenas me llamaste.

—Tiene mucha fiebre, otra vez —susurró con voz débil.

Rubén inhaló profundo.

—A esta edad es normal, debe se...

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