Capítulo 26 ¡NO TE ATREVAS A BUSCAR A MI MADRE!

Myriam ladeó los labios, aunque las empleadas de la boutique pensaron que ella se miraba en el espejo, su vista se hallaba anclada en la expresión de Gerald, fue inevitable que su estómago no se encogiera al notar como esa fría mirada se transformó en fuego, y le quemó la piel, sus entrañas se apret...

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