Capítulo 92: Arthur Bennet: ¡Culpable del accidente!

Gerald caminaba en su celda de un lado a otro, se sentía como un león enjaulado, presionaba y cerraba los puños esperando alguna respuesta acerca de su plan.

—Qué todo salga bien —susurraba pensando en Myriam, en su madre en la empresa.

Entonces escuchó el ruido de unos tacones, su mirada se ilu...

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