Capítulo 98: ¡Gerald, viniste por mi!

Raymond carcajeó al escucharlo.

—Así es como te quería escuchar, suplicante —expuso con voz ronca—. Esta noche vas a llevar los papeles que me acreditan como dueño de industrias Lennox —ordenó—, más adelante te llamo a darte los datos, y si avisas a la policía tu amada esposa se muere. —Colgó la l...

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