Capítulo 45

—¿Abigail? —la pregunta después de su silenció hizo que carraspeara suave, suplicándole a su garganta que no se cerrara tanto, y obligando a sus ojos a retenerse lo más que pudiera.

—Lo siento, un gusto —dijo hacia los hombres y todos asintieron con la cabeza.

—Sé que vas a quedar con ellos trabajan...

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