Capítulo 46

La cabeza de Abigail estaba recostada en el asiento, mientras veía de reojo en como Tom la miraba furioso por el retrovisor.

Apretó un poco el pañuelo en su labio, sabiendo que era solo de minutos para que su boca se hinchara más y su corte se secara. Todavía no podía creer que ese maldito se hubie...

Inicia sesión y continúa leyendo