Capítulo 111

POV KIERAN

El portazo no se oyó. Fue suave. Apenas un clic al cerrar, como si hasta la casa supiera que no había fuerza suficiente para más discusiones.

Volvimos de Bruselas hace dos días. Dos malditos días de silencios, de rutinas fingidas y de puertas que no cerraban del todo.

Yo no había vuelto...