Capítulo 35 Capítulo 35: Un bateador

Si por vergüenza uno pudiera morir, ya los médicos forenses estarían haciéndome la autopsia. Porque, la vergüenza que sentía, estaba por acabar con mi sistema nervioso. Porque incluso mis terminaciones nerviosas, habían entrado en un choque ante las palabras que había dicho la señora Every.

—Oh, por...

Inicia sesión y continúa leyendo