Capítulo 9 Capítulo 9: Intervenir

Mientras Adhara respiraba profundo preparándose para lo que, sin duda, sería la guerra más grande en su familia, Jareth, sonreía mirando la nota que le había dejado Adhara. Jareth, había regresado a la empresa con una sonrisa que daba miedo a todos.

Alguien que no sonreía, estaba sonriendo sin haber un motivo y eso, angustiaba a los demás. Porque, básicamente no sabían cómo actuar. Todos en la empresa estaban a la espera de una explosión, mientras Jareth sacaba de sus bolsillos lo que Adhara se había atrevido a dejarle.

— Esto es humillante, pero, gracioso. — susurra con voz gélida.

Nadie que escuchara su tono de voz y viera su mirada asesina, diría que lo que veía era algo divertido para Jareth y realmente no lo era. Había sido tratado como un hombre de compañía al que le habían dado como pago, menos de lo que él se gana en un día.

— Me las va a pagar. — susurra Jareth mientras llama a su secretaria que de inmediato, aparece al estar casi en la puerta.

— ¿Me necesita, señor Every?

— ¿Dónde está mi asistente?

— Me ha mencionado que está ocupado con un encargo, pero, en menos de una hora estará aquí para darle el informe.

— No creo que pueda soportar todo ese tiempo. Que mande lo que sabe por correo electrónico, no me importa, lo que quiero es tener toda la información en mis manos ahora y no voy a aceptar ninguna excusa. —  dice Jareth con voz fría y amenazante.

— Sí, señor. — dice la chica marchándose.

Jareth, estaba por volverse loco, no había podido concentrarse en una sola tarea de su trabajo, por estar pensando en la loba atrevida que lo había humillado de la peor forma. Sabía que era una omega.

Pero, había tantas omegas sin manada y con manada en todo el país, que saber quién era por su simple naturaleza era bastante complicado. De lo que si estaba seguro es que esa omega iba a darle dolores de cabeza, por lo que, debía responder pronto a su ataque.

— Señora, debo darle la información antes de que el señor me mate. — dice el asistente con temor.

— No te preocupes, no va a dañarte y si te presiona algo, di que una persona importante respalda a la chica. Así que, saber de ella es imposible. — dice Eda Every, madre de Jareth.

— No creo que eso convenza al señor. — dice el chico con miedo.

— No voy a dejar que este cerca de una omega cuyo antecedente es tan incierto que dudaría que sea lo que mi hijo necesita. Así que, no le dirás nada de lo que has encontrado. Yo haré una buena investigación y si me resulta interesante, haré que se reúnan nuevamente.

— Pero, señora, ¿Qué pasa si envía a otra persona a investigar sobre la señorita Simpson?

— No encontraran algo, porque yo bloquearé todo lo relacionado a ella. Así que, no necesitas preocuparte por ello. — dice Eda y el chico asiente levantándose de su asiento con mucho temor.

Solo cuando se marcha es que llega el mayor de los Every, sonriendo por haber tenido una buena tarde en el club. Apenas ve la mirada perdida de su esposa, sabe que algo está tramando y se sienta a la espera de la información del plan.

— ¿Qué vas a hacerle a tu hijo ahora? — pregunta Alex Every.

— No soy una bruja que solo vive para atormentar la vida de su hijo, si es lo que imaginas de mí.

— Tu rostro me dice que algo estás pensando y dudo que ese algo le guste a nuestro hijo. — dice Alex Every.

— Él no sabe que es lo que quiere, es normal que lo que yo sé que necesita, no le guste. Pero, no te preocupes, dependiendo de la información que consiga es que voy a proceder. — dice Eda levantándose de su asiento, para saber más de la chica que su hijo busca.

Por otra parte, Adhara esperaba en la sala a su hermana y ex prometido. Su padre, no se veía feliz y su esposa, solo caminaba de un lado al otro, para después arrodillarse a su esposo que apenas la ve, gira su cabeza con enojo.

‘Algo está pasando. No sé qué es, pero, algo debe estar pasando desde que mi padre ignora con molestia a su preciada esposa’ dice Adhara mentalmente.

— ¿Tengo que ir a buscarla para que venga? — pregunta Blad con frialdad.

— Ya viene, cariño. — dice Carrier a su esposo, para después gritar — ¡Emma, date prisa!

Al poco tiempo, Emma llega corriendo y llorando como siempre hacia para poder manipular a su padre. Blad, por un breve segundo dejó sus expresiones frías, para consolar a su hija.

Pero, como si el destino estuviera en contra de Emma, las marcas en su cuerpo, el recordaban a su padre, porque estaba molesto. Por lo que, se contuvo y con enojo miró a su hija que se arrodillaba frente a él.

— ¿Qué piensas decirme, Emma? — pregunta Blad y Emma mira hacia su madre, quien asiente.

‘¿Por qué siento que van a dirigir su culpa a mí? En el pasado, siempre me culpaban si algo se dañaba o si rompían las reglas de la casa, pero, en ese tiempo, papá no las encontraba en la escena del delito. Así que, esta vez, debe ser distinto. Debe serlo’ se dice Adhara mentalmente.

— Papá, lo que sucede es que mi hermana…

De inmediato, Adhara saca todas sus habilidades escondidas de actuación y comienza a llorar como si estuviera viendo a su ser más querido agonizar. Sabe muy bien lo que se siente, porque con su madre experimentó ese dolor, mismo que se extendió con los malos tratos de su hermanastra y madrastra.

Adhara era una experta en sentir dolor y callarlo, pero, esta vez usaría cada maltrato y burla, como motivo para llorar de tal manera que verla diera dolor. Su padre, miró hacia Adhara con preocupación.

— ¿Qué es lo que pasa, hija?

— Mi prometido y mi hermana me han traicionado. Eso es lo que sucede. Los amo tanto que mi corazón duele al sentir la traición de los dos. — dice Adhara en medio del llanto.

— Si que eres sorprendente. No te había dolido hasta que tu hermana te mencionó. Si que te duele mucho. — dice Carrier con molestia.

— De verdad duele, señora Simpson. Duele mucho ver que dos personas que quieres mucho, se unen para burlarse de ti de la manera más baja.

— Papá, es mentira. Ella no lo quería, Blake decía que solo se la pasaba estudiando y no le daba atención, es claro que ya estaban por terminar porque no había amor.

‘Maldito bastardo.’ dice Adhara mentalmente.

— Quería ser lo mejor para los dos. Ser una profesional con un increíble trabajo. Dime, padre, ¿Qué culpa tengo? ¿acaso cuando estabas trabajando duro para la familia, eso te hizo culpable de la traición de la señora Simpson con tu mejor amigo? — dice Adhara y el ambiente se torna frío.

Salías a trabajar porque estuviéramos mejor y así te pagaron. Yo estaba estudiando para que en un futuro mi esposo y yo estuviéramos mejor y así fue como me respondieron ambos. — dice Adhara llorando mientras Blad mira con enojo a su hija favorita.

‘No quería usar esa carta, pero, querían meterse conmigo. Debo defenderme antes que la explosión que lancen me deje sin posibilidad de defensa.’ dice Adhara mentalmente.