Los porqués

Ella soltó un chillido cuando él de repente la volteó, dejándola a lo largo del banco de la tapicería de cuero.

—Traviesa Zorah. —Sus ojos se agrandaron mientras levantaba la falda del vestido que ella llevaba—. ¿Zorah Maria Lucchesi, volaste en el avión sin ropa interior?

Ella sonrió sin vergüenz...