La vida sigue

Hoy cerré una puerta.

Literalmente.

Cerré la puerta de la casa donde me rompí, donde también aprendí a resistir. La casa donde Axel dijo sus primeras palabras, donde me escondí muchas noches a llorar en silencio, y también donde volví a amar... aunque el amor no haya sido suficiente.

Había caj...

Inicia sesión y continúa leyendo