69

NARRA BERENICE

¿Estás bien, cielo? – preguntó la dulce voz de mi novio.

Si – conteste automáticamente tratando de ocultar mi nerviosismo. – iré a ducharme, termina tu merienda Dante – hable a mi hijo y mire a Veronica - ¿Puedes ocuparte de terminar la cena, Veronica?

Claro mi niña – contesto mirá...