Capítulo 20 - De caliente a frío

—Entonces si eras casada. —Le dijo el tipejo, una tonta satisfacción se instaló en mi pecho.

—Nunca digo mentiras.

El hombre dio la vuelta y se retiró, miramos a la mesa donde compartían. Mi padre, Alejo y Carlos estaban sentados al lado de sus esposas.

» ¿Desde cuándo te encuentras a aquí? —alzó...