Capítulo 30. Encuentro inesperado

—¿Qué tanto me miras? —preguntó Kate con una sonrisa en el rostro, estaba comiéndose el postre luego de un delicioso almuerzo y pudo sentir la mirada de su esposo fija sobre ella.

—Lo hermosa que eres —comentó Ricardo, lamiéndose los labios.

Kate se mordió el labio, tuvo que frenarse para no salta...