Capítulo 6. ¡Eres mi esposa!

Michael contuvo el aliento y una mueca de decepción se dibujó en sus bellas facciones, mientras Kate sintió que el rostro se le tiñó de rojo carmesí. Los vellos de su nuca se erizaron un nuevo escalofrío recorrió su cuerpo de pies a cabeza.

Su corazón se aceleró, no se atrevía a mirar a Michael, su...