Capítulo 123 Tu hermana no está en casa

Isabella tropezó cuando Sophie la jaló hacia adelante, un tirón brusco que la obligó a recuperar el equilibrio. Frunció el ceño con frustración mientras intentaba aflojar el agarre de Sophie.

—Siempre te apresuras así. ¿Te das cuenta de lo fuerte que eres? Si sigues tirando, terminaré con moretones...

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