Capítulo 41 Regalo final

—¡Jenny, estás viva! —gritó Isabella con alegría.

Con un gesto de su mano, Jenny conjuró doce dagas rituales doradas que se materializaron en el aire, deteniendo la mano esquelética en seco.

—Por favor, déjame despedirme de mi estudiante —dijo Jenny con firmeza.

—Tu tiempo se ha acabado —respondi...

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