Todos los capítulos of La esposa rebelde del CEO
- Capítulo 1: Estar comprometida
- Capítulo 2: Pervertido
- Capítulo 3: Ir a su casa
- Capítulo 4: Encontrarme
- Capítulo 5: Vestido de novia negro
- Capítulo 6: Casarnos
- Capítulo 7: Firmar el acta
- Capítulo 8: Dar y recibir
- Capítulo 9: Ver a Max
- Capítulo 10: Tocar algo
- Capítulo 11: Su cuerpo
- Capítulo 12: No esperarlo
- Capítulo 13: Curiosidad
- Capítulo 14: Perder la razón
- Capítulo 15: Ser íntimos
- Capítulo 16: Katherine
- Capítulo 17: Mujer molesta
- Capítulo 18: Cosquillas
- Capítulo 19: Enviar a África
- Capítulo 20: Anciano sin energía
- Capítulo 21: Querer adaptarme
- Capítulo 22: Casi cincuenta
- Capítulo 23: Pervertidos
- Capítulo 24: Huir de Ryan
- Capítulo 25: Recorrer la casa
- Capítulo 26: Esconderme
- Capítulo 27: No gemir
- Capítulo 28: Sobre mi padre
- Capítulo 29: Comer juntos
- Capítulo 30: Preocuparme por su muerte
- Capítulo 31: Sangrar su nariz
- Capítulo 32: Deleitarse visualmente
- Capítulo 33: Ir a beber juntos
- Capítulo 34: Avergonzarme
- Capítulo 35: Tornado
- Capítulo 36: Perder el control
- Capítulo 37: Orden aburrida
- Capítulo 38: Plan escape
- Capítulo 39: Posibilidad de un infarto
- Capítulo 40: Crear mi trampa
- Capítulo 41: Comprendernos
- Capítulo 42: Tener guardias
- Capítulo 43: Una lección
- Capítulo 44: Ascensor
- Capítulo 45: Encerrados y sin luz
- Capítulo 46: Sin energía
- Capítulo 47: Bajar escalones conmigo
- Capítulo 48: Ocultar información
- Capítulo 49: Estar en problemas
- Capítulo 50: Tomar medidas
- Capítulo 51: Llegar a Paris
- Capítulo 52: Enojarme
- Capítulo 53: Avergonzarlo en Paris
- Capítulo 54: Pierre
- Capítulo 55: Un escape
- Capítulo 56: Un admirador molesto
- Capítulo 57: Encontrarme
- Capítulo 58: Accidente con el espejo
- Capítulo 59: Angustiarme
- Capítulo 60: Intentar corregir las cosas
- Capítulo 61: Marcharse
- Capítulo 62: Presentación de Sashel
- Capítulo 63: Decir la verdad
- Capítulo 64: Seguirme
- Capítulo 65: Pedir un corte
- Capítulo 66: Terrible caminando
- Capítulo 67: Chicas en el rio
- Capítulo 68: Dormir juntos
- Capítulo 69: Mentirle
- Capítulo 70: Conocer la casa
- Capítulo 71: Advertencias
- Capítulo 72: Estar en la empresa
- Capítulo 73: Sentir vergüenza
- Capítulo 74: Gritos
- Capítulo 75: Encerrarnos
- Capítulo 76: Tomar la llave
- Capítulo 77: Lastimarlo
- Capítulo 78: Evitar ir a prisión
- 79: Ser obediente
- Capítulo 80: Ir a su oficina
- 81: Explorar la casa
- Capítulo 82: Provocarme
- Capítulo 83: Combinación perfecta
- Capítulo 84: Mencionar a Anastasia
- Capítulo 85: Huir
- Capítulo 86: Perder
- Capítulo 87: Buscar a Day
- Capítulo 88: Una ayuda
- 89: Ir por ella
- Capítulo 90: No darme por vencido
- Capítulo 91: Golpear en la discoteca
- Capítulo 92: Olfatear
- Capítulo 93: Luchar
- Capítulo 94: Intentar escapar
- Capítulo 95: Intento de huida
- Capítulo 96: Efectos
- Capítulo 97: Aparecer
- Capítulo 98: Su presa
- Capítulo 99: Precio
- Capítulo 100: Intentar convencerme
- Capítulo 101: Petición
- Capítulo 102: Persuadirme
- Capítulo 103: Un secreto
- Capítulo 104: Mostrarme
- Capítulo 105: Temer
- Capítulo 106: Enojarme
- Capítulo 107: Ir a buscarme
- Capítulo 108: Llamada del banco
- Capítulo 109: Discutir
- Capítulo 110: Anciana
- Capítulo 111: Confesar algo
- Capítulo 112: Negociar
- Capítulo 113: Escuchar su llamado
- Capítulo 114: Querer entrenar juntos
- Capítulo 115: Cobarde
- Capítulo 116: Hablar con mis amigas
- Capítulo 117: Rumores en la universidad
- Capítulo 118: Estar molesta
- Capítulo 119: Nalgada
- Capítulo 120: Llanto
- Capítulo 121: No ser cobarde
- Capítulo 122: Reaccionar
- Capítulo 123: Luchar
- Capítulo 124: Empeorar todo
- Capítulo 125: Hablar con él
- Capítulo 126: Confesiones
- Capítulo 127: Intentar entenderlo
- Capítulo 128: Desastre de Sashel
- Capítulo 129: Hablar calmadamente
- Capítulo 130: Confesión inesperada
- Capítulo 131: Ser diferente
- Capítulo 132: Ser defendida
- Capítulo 133: Recarga de energía
- Capítulo 134: Convencerme en la cama
- Capítulo 135: ¿Traicionar a una amiga?
- Capítulo 136: Crímenes
- Capítulo 137: Llanto de Hanna
- Capítulo 138: Confusiones de sentimientos
- Capítulo 139: Ir a su oficina
- Capítulo 140: Sus condiciones
- Capítulo 141: Callarlo
- Capítulo 142: Grietas y fragmentos
- Capítulo 143: Molestarme
- Capítulo 144: Reunión en un bar.
- Capítulo 145: Vengarme
- Capítulo 146: Estar en problemas
- Capítulo 147: Desesperarse
- Capítulo 148: Enfrentarme a Mario
- Capítulo 149: Hacer una transmisión
- Capítulo 150: Enfrentarme a ellos.
- Capítulo 151: Confesarlo todo
- Capítulo 152: Aprobación de mi padre
- Capítulo 153: Alejarme de Ryan.
- Capítulo 154: Discutir
- Capítulo 155: Mantenerme en mi decisión
- Capítulo 156: Nuevos guardaespaldas
- Capítulo 157: Renegociar
- Capítulo 158: Actuar sospechoso
- Capítulo 159: Hablar con Mario
- Capítulo 160: Darme una advertencia
- Capítulo 161: Volver a mi casa
- Capítulo 162: Mojarme en la piscina
- Capítulo 163: Dudar lo que pensaba
- Capítulo 164: Sentirme mal
- Capítulo 165: Mi casa en el árbol
- Capítulo 166: Mejorar
- Capítulo 167: Información sobre Ryan
- Capítulo 168: Sorpresa
- Capítulo 169: Sospechar
- Capítulo 170: Escaparme
- Capítulo 171: Resultado
- Capítulo 172: Encontrarlo
- Capítulo 173: Estar molesta
- Capítulo 174: Actuar sospechoso
- Capítulo 175: Sentirme mal
- Capítulo 176: Verlo
- Capítulo 177: Empeorar las cosas
- Capítulo 178: Ser una estúpida
- Capítulo 179: Sentirme sola
- Capítulo 180: Querer saber la verdad
- Capítulo 181: Saber lo que sucedía
- Capítulo 182: Marcharnos a casa
- Capítulo 183: Culparlo
- Capítulo 184: Enterarme
- Capítulo 185: Saber de ella.
- Capítulo 186: Darme la noticia
- Capítulo 187: Confesar la verdad
- Capítulo 188: Intentar verla
- Capítulo 189: Dejarlo vermev La debilidad sigue en mi cuerpo. Escasamente puedo mantenerme despierta y la verdad, no sé si hacerlo sea buena idea. Después de todo, estar despierta me hace recordar que estoy sola y que mi padre, ya es cenizas de lo que una vez fue un cuerpo cálido. Todo ha pasado tan rápido. — susurro. Amiga… Deberías ir a casa, tu padre debe estar preocupado por ti. Ya se enteró de la noticia, le informé que estoy contigo y no me dijo algo más. — dice Hanna. Entiendo. Gracias por quedarte. Es mi lugar, Day. Nina y yo estaremos a tu lado en todo lo que necesites. — dice Hanna y yo asiento. No tengo ánimo de hablar, estoy tan agotada y los mareos aparecen en cualquier momento aun estando acostada, que no me siento con ánimo para hablar o hacer algo tan simple como levantarme. Por eso, solo me quedo en silencio mirando el techo de la habitación. ¿Te sientes mejor? Me siento igual, Hanna. — susurro. ¿Quieres comer algo? No. Debes comer. Hanna, ¿puedes averiguar si Nina ha ido con mi padre como dijo? ¿Por qué crees que no? ¿Acaso piensas que nos mintió? Niego de inmediato, las chicas son bastante desordenadas y mentirosas de ser necesario, pero, esto último lo hacen con sus familiares y docentes que quieren darle órdenes que no son de su interés. Pero, conmigo eso no sucede porque saben que yo no las juzgaré por lo que hagan o dejen de hacer. Por eso, sé que si no ha aparecido es porque algo ha pasado, quizás si se fue sin problemas o no, y en esa negativa, está la presencia de Ryan en el hospital. Llámala, por favor. Algo me dice que las cosas no son tan simples como se cree. Day, sé que estás sensible… Yo no soy quien se ha hecho cargo de los preparativos. Si hay algún problema, llamarán a Ryan o quien se haya hecho cargo de todo, a mí solo me llamarían para entregármelo o llamarme para dar la autorización de que alguien lo reciba por mí. >> Así que, por más que lo piense, es extraño. Por eso, lo mejor es que verifique que todo esté bien con Nina, porque con Ryan aquí, cualquier cosa puede suceder. — digo y Hanna asiente pensativa. Lo entiendo, pero, no quiero dejarte sola. No me resulta cómodo hacerlo. Estas pasando en estos momentos por muchas cosas y por eso, quiero acompañarte tanto como sea posible. No voy a hacerme daño, Hanna. Tengo una razón para mantenerme con vida. además, mi padre se esforzó tanto para que su enfermedad no me afectará y pudiera seguir con mi vida. >> Por lo que, si me hago daño, estaría lanzando a la basura todos los esfuerzos de mi padre. Eso es algo que no puedo permitirme hacer. Así que, haz lo que necesites hacer, yo estaré bien. — le digo con una sonrisa triste. Hanna asiente y se marcha prometiendo volver pronto, pero, yo solo me concentro en poner mi mente en blanco y así no pensar en algo. Apenas he despertado de mi desmayo y no quiero volver a exponerme a un peligro innecesario cuando solo debo calmarme. Disculpe… — dice una enfermera. ¿Qué sucede? Nos han pedido que la preparemos para una ecografía. La ginecóloga vendrá pronto y por eso, debemos prepararnos. ¿Otra vez? Supe que me hicieron una cuando estaba inconsciente. Sí, señora. Se realizará una transvaginal donde esperan que este consciente para darle toda la información pertinente. Comienzo a asentir y me levanto de mi camilla, para poder prepararme para la revisión donde debo estar sin ropa interior. Las enfermeras empujan una maquina bastante grande y yo me quedo esperando que me digan algo bueno, mientras se miran entre sí con nerviosismo. ¿Sucede algo? N-nada, señora. Nada. ¿Está causando problemas mi esposo? Ha empezado a requisar el hospital. Ya han llamado a la policía, pero, eso no parece importarle. — dice una de las enfermeras y la doctora aclara la garganta, causando que ellas hagan un pequeño salto en señal de miedo y susto. Se supone que no se le debe proporcionar información molesta a una paciente inestable emocionalmente. — dice la doctora. Lo sentimos. Las chicas retroceden con temor y por eso, decido hablar. Ya he controlado mis emociones y sus comentarios no causaron un cambio significativo. Reprimir las emociones o fingir que nada la afecta, no es controlar sus emociones, señora Volkova. Creswell, mi apellido es Creswell. — corrijo. La doctora comienza a asentir incomoda, se disculpa por su confusión y comienza a prepararse para la revisión. Sin embargo, eso no elimina la tensión que hay en el lugar y todo empeora cuando se escuchan gritos y un ruido molesto que a cualquiera le causaría malestar. Déjenlo pasar. No creo que sea buena idea que se enfrente a él, señora. Yo me daré la vena porque me enredé con la vía intravenosa cuando me desmayé, eso no fue su culpa. — digo con seriedad. ¡Busquen a mi esposa en cada rincón de este piso! — grita Ryan y yo miro a la doctora. ¿Quieren esperar más tiempo? Porque pueden esconderme en el baño, pero, aun así me encontrará. Díganle donde estamos. — dice la doctora a una enfermera. La mujer se marcha y en menos de tres minutos, Ryan está en el umbral de la puerta, hiperventilando y con una mirada cargada de una angustia que no me causa el menor rastro de simpatía. Estas aquí. Necesito calma, Ryan. Van a revisarme y necesito que no hagas algo caótico. Si no puedes controlarte, no solo te sacarán a patadas de aquí, si no que, me marcharé sin dejar rastro, porque si no puedes controlarte en una revisión importante, no lo harás nunca y yo no puedo exponerme así. — digo con seriedad. Me comportaré, te lo prometo. — dice él y yo miro a la doctora. Comenzaremos directamente con una ecografía… ¿No perdió el bebé? Tenía mucha sangre en su entrepierna. — dice Ryan. Ordena a tus hombres que dejen de hacer caos, desde aquí escucho el ruido que causan. Ryan de inmediato, saca su teléfono y escribe en este para posteriormente guardarlo y así acercarse a mí al punto que está en los pies de la camilla. Listo. No tuve una amenaza de aborto, solo en la caída me dañé la vena y fue esa la sangre que salió al quedar la vena perforada expuesta. Mi mano quedó en mi pierna, por eso, viste el camino de sangre. — explico y él asiente. Fue mi culpa, si te hubiese atrapado, no te habrías lastimado, lo siento mucho. <Chapter>Capítulo 190: Saber de mi estado
- Capítulo 190: Saber de mi estado
- Capítulo 191: Querer estar sola
- Capítulo 192: Urna de mi padre
- Capítulo 193: El tiempo pasa
- Capítulo 194: Recibir el sobre
- Capítulo 195: Herirme
- Capítulo 196: Enfrentarla
- Capítulo 197: Ser fría
- Capítulo 198: Prepararme para despedirlo
- Capítulo 199: Estar en el cementerio
- Capítulo 200: Una loca en la lluvia
- Capítulo 201: Revisión dolorosa
- Capítulo 202: Arruinarlo todo
- Capítulo 203: Intento de trampa
- Capítulo 204: Darme una advertencia
- Capítulo 205: Estar para ella
- Capítulo 206: Tener una idea
- Capítulo 207: Saber del bebé
- Capítulo 208: Despedirnos
- Capítulo 209: Enloquecerme
- Capítulo 210: Aclararle las cosas
- Capítulo 211: Intentar relajarme
- Capítulo 212: Ser directa
- Capítulo 213: Estar más tranquilos
- Capítulo 214: Salir del hospital
- Capítulo 215: Mudanza
- Capítulo 216: Vecino
- Capítulo 217: Causar problemas
- Capítulo 218: Discutir
- Capítulo 219: Invitación
- Capítulo 220: Ir a la fiesta
- Capítulo 221: Celeste
- Capítulo 222: Ir a la oficina
- Capítulo 223: Dejarme llevar
- Capítulo 224: Jugar rudo
- Capítulo 225: Anunciarlo
- Capítulo 226: Fingir calma
- Capítulo 227: Aceptar mi decisión
- Capítulo 228: Estar ebrio
- Capítulo 229: Movimiento de los bebés
- Capítulo 230: Estar ebrio
- Capítulo 231: Escenas de ebrio
- Capítulo 232: Acompañarlo en el hospital
- Capítulo 233: Excitación
- Capítulo 234: La visita de Celeste
- Capítulo 235: Enfermo
- Capítulo 236: Sufrir por su enfermedad
- Capítulo 237: Regaños de Sashel
- Capítulo 238: Conversación con Celeste
- Capítulo 239: Ser sincero conmigo
- Capítulo 240: Regaños
- Capítulo 241: Regaños de mis amigas
- Capítulo 242: Amenazas
- Capítulo 243: Cita con Aleksander
- Capítulo 244: Un grave error
- Capítulo 245: Estar en problemas
- Capítulo 246: Entenderlo todo
- Capítulo 247: Saber más
- Capítulo 248: Hablar con Ryan
- Capítulo 249: Motivo
- Capítulo 250: Distancias
- Capítulo 251: Ir a cita médica con él
- Capítulo 252: Consolarme
- Capítulo 253: Un atacante
- Capítulo 254: Atentados
- Capítulo 255: Probabilidades
- Capítulo 256: Suplicar
- Capítulo 257: El paso del tiempo
- Capítulo 258: Seguir buscando
- Capítulo 259: Luchar por encontrarlo
- Capítulo 260: Despertar
- Capítulo 261: Estar juntos
- Capítulo 262: Comenzar a intervenir
- Capítulo 263: Ser una molestia
- Capítulo 264: Hacerme cargo
- Capítulo 265: Hablar con él
- Capítulo 266: No recordar
- Capítulo 267: Beneficios de un divorcio
- Capítulo 268: Tomar una decisión
- Capítulo 269: Enojarse
- Capítulo 270: Quedarme a su lado
- Capítulo 271: Ser su cuidadora
- Capítulo 272: Molestarme
- Capítulo 273: Sufrir
- Capítulo 274: Amarme
- Capítulo 275: Someterse a cirugía
- Capítulo 276: Saber quién fue
- Capítulo 277: Cuidar a mi familia
- Capítulo 278: Dejar el dolor.
- Capítulo 279: Ser fuertes
- Capítulo 280: Epílogo